Los peces picudos son organismos oceánicos, altamente migratorios, de gran tamaño, lento crecimiento, y complejos ciclos reproductivos. Son depredadores topes que se alimentan de organismos pelágicos de aguas oceánicas y organismos demersales de los fondos marinos.
Diversas especies de picudos han sido el apoyo tradicional de la pesca recreacional, además de ser objeto de captura incidental en la pesca industrial y artesanal.
En Panamá, la pesca del marlín negro, marlín azul, marlín rayado, pez lanceta, marlín blanco, pez vela y pez espada esta reservada para la pesca recreacional (según Decreto Ejecutivo No 33 de 1997). En muchos países estas especies son capturadas
bajo el concepto de “captura y liberación” en la cual el pez es capturado con anzuelo y liberado posteriormente desde la embarcación.
El Plan Nacional de Acción para la Pesca Sostenible fue adoptado en 2017. El Plan reconoce que los recursos pesqueros están bajo excesiva presión por el incremento descontrolado del esfuerzo pesquero sin controles por muchos años, lo que provocaría la perdida de estos de no implementarse urgentemente un manejo sostenible. Se identifica la necesidad de obtener estadísticas pesqueras confiables que permita manejar científicamente los recursos pesqueros, incluyendo al subsector de la pesca recreativa. La conservación de estas especies requiere de estadísticas pesqueras y medidas de manejo sostenible locales y regionales.